3.2.21

Bosque.


“Cruzas por el crepúsculo.
El aire
tienes que separarlo casi con las manos
de tan denso, de tan impenetrable.
Andas. No dejan huellas
tus pies. Cientos de árboles
contienen el aliento sobre tu
cabeza. Un pájaro no sabe
que estás allí, y lanza su silbido
largo al otro lado del paisaje.
El mundo cambia de color: es como el eco
del mundo. Eco distante
que tú estremeces, traspasando
las últimas fronteras de la tarde”.

Ángel González. ‘Bosque’.
en Palabra sobre palabra, [obra completa hasta 1992] (pág. 57). Seix Barral, Barcelona, 1994.
                                          [oír=  http://www.youtube.com/watch?v=r4fu8HUP1QA ]

:: :: ::

      En los poemas de Ángel González en los que se percibe el goce de la contemplación de la amada, es donde mejor se aprecia el deseo del poeta de capturar el presente, de parar el tiempo y alargar el instante de dicha para que no concluya.
En el poema ‘Bosque’ se presenta, en remedo cierto de Juan de la Cruz en Cántico Espiritual, a la amada paseando mientras los componentes de la naturaleza se estremecen a su paso. La escena trascurre en presente y trata no tanto de un mundo real sino de un escenario transformado por la presencia de la amada y los efectos que ella causa en los elementos personificados de la naturaleza, consiguiendo que al final ese universo transfigurado se presente como su propio eco. Lo que no veda que el poema connote Cultura enfrentada a Naturaleza.

:: :: :: 

[a partir de un texto de Z.]

No hay comentarios:

Publicar un comentario