10.5.14

Paganas pasiones (y 3).


                           III
El lento florecer del fresno hiriente
no mitiga la espera silenciosa,
la esperanza de amores renaciente
o el gozo que en tu olvido ya reposa.

La exuberante hierba te acompaña
en estos juegos de la edad tardía,
la nostalgia con lágrimas empaña
tu imagen que un gris cielo detendría.

Oferente me entregarás tus ramos
de virtud y pureza, vergonzosa
encenderás anhelos, y forzosa

se escapará mi dicha de las manos.
Viajaré por tu cuerpo con mis besos
y desearé de tu boca mil excesos.
17 y 18/04/2014.

7.5.14

Paganas pasiones (2).


                                   II
Igual que los vencejos todas las primaveras
reconstruyen sus nidos, yo quisiera
rehabilitar aquel primer amor
a base de pasiones, pues no restan
más ruinas que mementos ardorosos:

- Tus senos, dos alcores
coronados de gemas serpentinas
o ensenadas donde varar mis dedos
satisfechos tras navegar tu espalda.

- Tus labios, miel
de lavanda recién recolectada
cuando rozas suave mi deseo.

- Tu pubis, un rosal
de donde, con certeza,
si cortas una flor de terciopelo
escapas malherido.

- Tus ojos. No, tus ojos…
si cautivo me hubieses tú mirado
quizás, quiero creer, me habrías amado.
16/04/2014.

4.5.14

Paganas pasiones (1).


                                    I
Van pasando los días con lentitud perdida,
yacente te proteges entre las altas hierbas
y el cielo sobre ti, sin horizontes.

Toda conciencia estéril te paraliza el alma:
nunca fuiste feliz -nadie lo sabe-.

Se ven crecer las hojas en las ramas
ahora en abrileña primavera
las briznas, casi inmóviles sin viento,
su devenir aguardan resignadas
y oyes talar un árbol, 
                                      rememoras
que el desamor te ha sajado la vida
                                    tantas veces
que solo tienes para donar, heridas.
Luna llena. 15/04/2014.