2.6.17

Pavese: El vicio absurdo (8).


Otra vez caerá la lluvia
en tus dulces enlosados,
una lluvia ligera
como un hálito o un pasar.
Otra vez la brisa y la alborada
florecerán ligeras
como bajo tu paso,
cuando vuelvas a casa.
Entre las flores y los antepechos
los gatos lo sabrán.

Tendremos otros días,
tendremos otras voces.
Sonreirás a solas.
Los gatos lo sabrán.
Oirás palabras caducas,
palabras cansadas y vanas
como trajes desechados
de las fiestas del ayer.

Hasta tú harás gestos.
Responderás palabras –
rostro de primavera,
hasta tú harás gestos.

Los gatos lo sabrán,
rostro de primavera;
y la lluvia ligera,
el alba color jacinto,
que el corazón laceran
de quien ya no te espera,
son la triste sonrisa
que sonríes a solas.
Tendremos otros días,
otras voces y despertares.
Sufriremos en el alba,
rostro de primavera.


Los gatos lo sabrán. Cesare Pavese
 10 de abril de 1950.


© Traducción de Sr. Verle


 

29.5.17

Pavese: El vicio absurdo (7).


También se te asemeja la noche,
la noche remota que solloza
muda, dentro del corazón profundo,
y las estrellas pasan fatigadas.
Una mejilla toca una mejilla –
es un frío temblor, alguien
se debate y te implora, solo,
extraviado en ti, en tu fiebre.

La noche sufre y anhela el alba,
pobre corazón sobrecogido.
O rostro taciturno, tenebrosa congoja,
fiebre que entristece las estrellas,
hay alguien como tú que espera el alba
escrutando en silencio tu semblante.
Tendida estás debajo de la noche
como un cerrado horizonte mortecino.
Pobre corazón sobrecogido,
un día lejano eras el alba.




La noche en que tú dormías. Cesare Pavese
 4 de abril de 1950.


© Traducción de Sr. Verle